Al poco tiempo de comenzar mi tratamiento de quimioterapia empecé a notar enrojecimiento en la piel de las manos y los pies, acompañado de cosquilleo, ardor y a veces dolor. En mi caso fueron sobre todo las manos las que tenía más afectadas, de hecho a veces tenía dificultad a la hora de utilizarlas en tareas que precisaran fuerza y se me pelaban con frecuencia.
Espero que sea de utilidad a quien lo esté padeciendo, y a quienes vayáis a comenzar un tratamiento de quimioterapia quizás os venga bien la información.
Lo que hice para mitigar estos efectos fueron varias cosas:
- Evitar esas tareas que requerían fuerza o fricción: manejo de ciertas herramientas por ejemplo, incluso abrir ciertos envases.
- Atención en la cocina y a la hora de fregar los platos. Siempre utilizando guantes de goma o de vinilo, poniendo debajo otros de algodón.
- Evitar el contacto directo con detergentes de ropa o productos de limpieza, que pueden contener sustancias abrasivas.
- Evitar caminar descalza.
- Visitar al podólogo con regularidad, informándole del tratamiento que estaba llevando para que no me hiciera limpiezas muy profundas.
- Utilizar calzado cómodo y holgado.
- Utilizar cremas de calidad para hidratar la piel: en mi caso, aceite de almendras o de coco principalmente y de la farmacia me aplicaba Pliazon de Merck Serono, que es una crema que ayuda a controlar erupciones cutáneas en pacientes oncológicos.
El tratamiento también afectó a las uñas de mis manos, que se tornaron moradas (como si me hubiera entallado los dedos con una puerta, para que os hagáis una idea), se volvieron débiles y se levantaron de piel (sin llegar a desprenderse). Todo esto hace que las uñas sean más propensas a infectarse e incluso caerse. Para contrarrestar estos efectos os cuento lo que hice porque me fue realmente bien.
Dos veces al día, una por la mañana y otra por la tarde-noche, disponía en un bol agua templada con un buen chorro de betadine y sumergía los dedos en este preparado durante 5 minutos. Después los secaba muy bien con gasas estériles. De este modo, evité infecciones y mis uñas se mantuvieron sanitas todo el tiempo.
Publicado por